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Cientos...


En tanto, los ganadores de la categoría tradicional correspondieron a la Escuela de Bachilleres Plantel San Juan del Río, el primer lugar; el segundo sitio fue para la Escuela Preparatoria incorporada Gustavo Adolfo Becquer y el tercero lo ocupó el grupo seis del 6º semestre de la Escuela de Bachilleres Plantel Sur.

Es importante señalar que este tradicional evento mexicano fue amenizado por el Grupo de Ballet de la Escuela de Bachilleres, dirigido por el Mtro. Jorge Bustabat Gutiérrez; el Grupo Aztlán de la Benemérita Escuela Normal del Estado; la Lotería de la Muerte, a cargo de Ricardo de Luna Genel; la Estudiantina de la Escuela Preparatoria, dirigida por el Mtro. Daniel Ortiz y un representativo grupo de concheros.

Las Nupcias de la Muerte

¡Por fin se casa la muerte!                      Con una sensual sonrisa
Para darle duro al cran                           Se quitó su maquillaje
¿A quién le tocó la suerte?                      La dentadura postiza
¿La suerte fue de Satán?                         La puso en el equipaje.
La misa fue en el Mar Muerto                 Lucifer quedó pasmado
En una iglesia flotantes                            Con tan horrenda visión
¡El diablo hasta comulgó!                       ¿A qué bruja del condado
Hipócrita y petulante.                             Le entregué mi corazón?
En fastuosa recepción                            Por fin la miró desnuda
En el averno la cita                                Con sus piernas de popote
Comiendo pulpo y ostión                       ¡Que calavera conchuda!
¡Hasta engordó la flaquita!                     Y yo tan bello y guapote.
El diablo estaba chiveado                       No me castigues diosito
¡Tan suculento manjar!                           No me he portado tan mal
Que se puso colorado                            Dime calaca si tienes
Cuando él quitó el ajuar.                        Algo que sea original.
De Infonavit la cabeza                           Oronda y muy presumida
Con sus tres metros de frente                Al decirlo se envanece
¡Qué reluciente belleza!                         Tengo una niña de cinco
Con peinado permanente.                     Y unos gemelos de trece.
Se quitó la crinolina                               Te perdono tu calvicie
Quedando en puro refajo                       Lo tilica no me espanta
¡Ridícula pantomima!                             Ni tus patas de popote
Pensó en mandarla al carajo.                 ¡Pero no lo suripanta!
                

Oscar Miguel Manríquez Guerrero
Preparatoria Norte
Semestre: 5°
Primer lugar, 2004

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